martes, 28 de febrero de 2017

Discrepancias

Personalmente, cada vez discrepo más sobre esta sociedad. Pienso que es un castillo de arena, construido sobre los miedos de la gente, la persistente inestabilidad en la que vivimos y el miedo sobre el futuro. La vida es jodida, lo sabemos, y a veces nos bloqueamos y buscamos argumentos e ideas que nos arrojen algo de luz. Es comprensible, no sé si recomendable. Pero debo decir que cuanto más mayor me hago, más escéptico me vuelvo. Creo que nos educan para ser empleados toda la vida, para no ser emprendedores, nos llevan por el camino que el éxito ya es de otros, ser exitoso para nuestros tíos, padres, mirones del face, es trabajar en una multinacional, hay si te ven con buenos ojos, pero si se te ocurre una idea de emprender estas fuera del radar, no solo de tu banco, sino de las políticas de gobierno, los impuestos, las cámaras de comercio, es como que te ven, te cobran, pero creen un carajo en tu mundo. No se descojonan porque no les da la diplomacia para tanto. La respuesta está en una buena charla con amigos de verdad, te da muchas claves para vivir. Creo que una buena peli, un buen vino, un buen libro, un ensayo, una novela, un poema, una obra de teatro, un paseo con calma, abre la mente y enseña los caminos. Siempre ha sido así. El éxito como suena, reiterativo y oportunista no está en las manos de nadie, es la respuesta de nosotros mismos a ser feliz con lo que hagamos.

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